Gritos de Muerte (Dead Birds)

Gritos de Muerte es una película de la que, siendo franco, no había oído hablar. ¡¡Además, con ese nombre!! Llegó a mis manos por una serie de tumbos de la suerte, bajo la recomendación efusiva de un amigo, así que le saqué un pequeño hueco. Aunque no esperaba nada de ella, la verdad.

Pues bien, me encuentro con una película de terror situada en plena Guerra de la Independencia de EEUU de América, en los estados sureños. Un grupo de cuatreros asaltadores huyen del ejército después de un sanguinario atraco nada piadoso y se ocultan en una enorme mansión abandonada, rodeada de trigales secos, para pasar la noche tormentosa que se avecina. A la mañana siguiente cruzarán la frontera hacia México.

Escenario servido para una típica película de casa encantada con monstruo. Si a eso le añadimos un grupo de gente que se va separando para inspeccionar la casa, ruidos sospechosos, voces infantiles, y casa con leyenda negra, podríamos encontrarnos con la típica película…

Pues no lo es tanto: lo inhabitual de la ambientación, un cierto gore bizarro, todas las escenas poco explícitas, personajes a los que por su crueldad inicial no les tienes apego, y unos giros argumentales muy extraños, hacen de esta película una curiosidad bastante interesante. Además, unos títulos de crédito muy hermosos, un buen uso y posicionamiento de la cámara, y por qué no, ver sufrir al ya adulto niño de E.T. hacen de esta película una pequeña delicatessen.

Sigo con la sinceridad: los pelillos de mi nuca se erizaron un par de veces, la tensión me mantuvo despierto y espabilado hasta que terminó, a altas horas de la noche (algo que cada vez me cuesta más), y esta mañana al levantarme me lo he pensado un poco al encender la luz.

Supongo que la película me ha cogido con la defensa baja. Lamento elevarles las expectativas de esta forma, ya que entonces no les cogerá por sorpresa…


De todas formas, si consiguen hacerse con ella, no duden en ojearla.
Ya me contarán.

Saludos,
Yume.