Antes que nada agradecer a la gente de Cine Asia por la invitación.
Igual que cuando fui a ver “Thai dragon”, la idea con la cual acepté la invitación fue la siguiente: pasármelo bien con mis amigos en el cine y después cumplir escribiendo una reseña.
Escribir sobre “Thai dragon” me resultó realmente complicado, no porque la película planteara dificultades, sino porque me veía incapaz de darle una forma correcta a la reseña.
Ahora debía hacer lo propio con “Dead or alive”, nadie me obliga a ello, lo hago porque soy un chico medianamente educado y lo mínimo que puedo hacer si me han invitado a ver un film es escribir sobre él. Lo que intento decir con toda esta parrafada inútil es que de “Thai dragon” hablé de todo menos de la película, pensaba que si escribía lo que realmente pensaba, la gente de Cine Asia no volvería a darnos nunca entradas al cine. Claro, hay que ser realmente ingenuo y egocéntrico como yo para pensar que responsables de tan respetable casa van a leer lo que cuatro pelmazos escriben en un blog. Pero yo quise ser cauto.
Ahora, y como dije anteriormente, me sucede lo mismo con “Dead or alive”... y es que joder, la película es tan..., que cualquier persona la destrozaría en cuatro líneas y animaría a la gente a que gastase su dinero en otra película, por ejemplo “El viento que agita la cebada” de Ken Loach.
Ahora releo lo escrito hasta el momento y me reafirmo en mi teoría de que nunca seré un crítico o un analista de verdad. O al menos un profesional del medio crítico. Soy una persona realmente impulsiva e irracional, cambio de estado anímico como cualquier chico cambia de calcetines. Si trabajara como crítico en cualquier revista del corazón, como por ejemplo Fotogramas, no duraría ni cinco días.
De verdad, no soy irónico si digo que me siento triste porque me resulta complicado escribir...
“chicos, no vayáis a ver D.O.A. su guión es inútil y machista, existen planos fuera de foco, las interpretaciones (por no mencionar el resto de elementos cinematográficos) son de suicidio colectivo y bla, bla, bla...”
esto lo consideraría bastante moderado.
Más complicado me resulta escribir hipócritamente algo por tener previo acuerdo con las distribuidoras...
“D.O.A. es la mejor película de los últimos treinta años, de guión exquisito y sutil no defraudará a los miles de seguidores del juego de video... sí, esos mismos que se hacen pajotes después de pasar horas dándole al mando de su consola. D.O.A. es poesía en estado puro, cada encuadre está pensado al milímetro y bla, bla, bla...”
Por eso me siento mal, porque soy incapaz de ser políticamente correcto, porque soy incapaz de escribir algo para que no ofenda a nadie, porque soy incapaz de ser capaz. Joder...
Igual que cuando fui a ver “Thai dragon”, la idea con la cual acepté la invitación fue la siguiente: pasármelo bien con mis amigos en el cine y después cumplir escribiendo una reseña.
Escribir sobre “Thai dragon” me resultó realmente complicado, no porque la película planteara dificultades, sino porque me veía incapaz de darle una forma correcta a la reseña.
Ahora debía hacer lo propio con “Dead or alive”, nadie me obliga a ello, lo hago porque soy un chico medianamente educado y lo mínimo que puedo hacer si me han invitado a ver un film es escribir sobre él. Lo que intento decir con toda esta parrafada inútil es que de “Thai dragon” hablé de todo menos de la película, pensaba que si escribía lo que realmente pensaba, la gente de Cine Asia no volvería a darnos nunca entradas al cine. Claro, hay que ser realmente ingenuo y egocéntrico como yo para pensar que responsables de tan respetable casa van a leer lo que cuatro pelmazos escriben en un blog. Pero yo quise ser cauto.
Ahora, y como dije anteriormente, me sucede lo mismo con “Dead or alive”... y es que joder, la película es tan..., que cualquier persona la destrozaría en cuatro líneas y animaría a la gente a que gastase su dinero en otra película, por ejemplo “El viento que agita la cebada” de Ken Loach.
Ahora releo lo escrito hasta el momento y me reafirmo en mi teoría de que nunca seré un crítico o un analista de verdad. O al menos un profesional del medio crítico. Soy una persona realmente impulsiva e irracional, cambio de estado anímico como cualquier chico cambia de calcetines. Si trabajara como crítico en cualquier revista del corazón, como por ejemplo Fotogramas, no duraría ni cinco días.
De verdad, no soy irónico si digo que me siento triste porque me resulta complicado escribir...
“chicos, no vayáis a ver D.O.A. su guión es inútil y machista, existen planos fuera de foco, las interpretaciones (por no mencionar el resto de elementos cinematográficos) son de suicidio colectivo y bla, bla, bla...”
esto lo consideraría bastante moderado.
Más complicado me resulta escribir hipócritamente algo por tener previo acuerdo con las distribuidoras...
“D.O.A. es la mejor película de los últimos treinta años, de guión exquisito y sutil no defraudará a los miles de seguidores del juego de video... sí, esos mismos que se hacen pajotes después de pasar horas dándole al mando de su consola. D.O.A. es poesía en estado puro, cada encuadre está pensado al milímetro y bla, bla, bla...”
Por eso me siento mal, porque soy incapaz de ser políticamente correcto, porque soy incapaz de escribir algo para que no ofenda a nadie, porque soy incapaz de ser capaz. Joder...
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14 comentarios :
Mi teoría es que cuando no hay nada que decir de una película, no se escribe sobre ella.
Si "tienes" que hacerlo, no queda otra opción que hacer referencia a la información que figura en la gacetilla, pero eso sí sería una reseña y no una crítica.
Si escribieras el primero de los dos párrafos que se te hace complicado escribir, estarías redactando un texto crítico. Si escribieras el segundo, serías un redactor "a sueldo".
La ética es una. Si no puedes escribir sobre una peli porque no vale la pena, lo mejor es no escribir... y si te comprometiste, aplaudo este reconocimiento de no poder hacerlo.
Normalmente es más fácil destrozar una película mala que alabar una buena. Pero mucho más fácil es dorar la píldora impúdicamente; eso lo hacemos todos, el que más y el que menos, cada día: "Qué bien te queda ese peinado!!". Así que tu honestidad bartlebyana es de alabar. De todos modos yo asumí que jamás sería crítico de cine cuando leí al ilustre Guarner; cada uno debe asumir sus límites a tiempo.
Saludos VideoArenileS.
Los reparos de Marc, espero que sean por respeto a los que nos han invitado a ver semejante engendro (aunque tampoco creo que necesiten escuchar alabanzas de algo que no las merece en absoluto... hay que pensar que son una revista, no una productora).
Lo que sí que no querría es que por ese "respeto" alguien se quedara con las ganas de decir algo. Y mucho menos es mi intencion censurar opiniones (de momento..., ya veríamos en otras circunstancias). Por eso me parece perfecto este texto de Jardí. Con el grado justo de cinismo, y su elegancia y contención característica, escondida detras de esa genial falsa humildad.
Aunque también me parecería perfecta una reseña cañera y cabrona de las que hacen los de VideoArena (bienvenido de vuelta, Sr. Vaugan). Ojalá tuviera yo cierta polémica (pero sin trolls, claro).
Al final hemos colgado 2 reseñas de DOA (!!!) y probáblemete sean dos críticas nada positivas...
Trabajo bien hecho.
Estoy de acuerdo en lo que han dicho antes por ahí: si no tienes nada que decir sobre un despropósito puedes elegir no decir nada. O decir mucho acerca de porqué no quieres decir nada, que creo que es lo que has hecho.
Saludos.
Yo creo que se debe ser apasionado en todo lo que se hace. Tomando ese punto de partida, deberías haber destrozado la película, ya que tanto te disgustó. Total, a los distribuidores les trae sin cuidado lo que digan en medios minoritarios.
El mundo de la crítica es una farsa edificada sobre intereses comerciales y mentiras. Aun peor, desde que el crítico es la estrella (adaptando el lema de la "nouvelle vague"), han comenzado a florecer como hongos los seguidores de tal o tal crítico. Y eso sí que es triste, asentir a lo que otro diga sin rechistar.
Hay un diálogo en "Celebrity", que he utilizado en un posteo acerca del mundillo crítico que no sé si terminaré algún día, que lo define acertadamente:
"Aquel tipo de allí es un crítico muy famoso. Antes no le gustaba ninguna película. Después se casó con una rubia tetona y ahora le gustan todas las películas"...
Cortesía de Woody Allen.
Saludos.
Alex, me parece que estás generalizando. Yo no creo que la crítica sea sólo tarea de esos señores de la tetona. Pobre crítica, está bastardeada hasta el infinito.
Esa postura de la que hablas es sólo una forma de actuar de gente sin escrúpulos, o de gente que se cree más que los demás, o de gente que no respeta el trabajo que hay detrás de cada producción... y en el fondo, escribe al son de las distribuidoras y productores (como bien dices)... pero no son todos, y no hay que darles todo el territorio de la crítica a ellos. Ese territorio es mucho más amplio, ellos sólo son unos parásitos.
No, no, Liliana, no pretendía generalizar. Hacerlo es siempre un error.
Me refería a la crítica que trabaja para los grandes medios de comunicación. A los serviles que se encargan de encauzar las ríadas de público con sus programas de televisión, radio o columnas de prensa.
Y te pongo como ejemplo la revista de cine con mayor tirada en España, "Fotogramas". Durante los muchos años en los que la compré te puedo demostrar que no leí apenas críticas negativas en sus páginas. Daba igual la película que se analizase, la opinión final siempre era condescendiente.
El último ejemplo se puede comprobar fácilmente con "Alatriste", lamentable superproducción propia, que ha sido elevada a los altares unánimemente por una crítica concienciada por la industria en que si la película caía, también ellos caerían. La famosa frase hecha de "no se deben tirar piedras contra tu propio tejado" se ha materializado como nunca en esta ocasión.
Vivímos un tiempo en el que la crítica no se aplica con libertad plena. Basta con leer la página Rotten Tomatoes, referencia única para saber la evolución que sigue en los Estados Unidos, para darse cuenta de que el pensamiento independiente excasea cada día más.
Es un tema largo y complejo. En cualquier caso, insisto en que no quería generalizar.
Yo estoy con la teoría de Liliana de no escribir sobre una peli si no tienes nada que decir. Ésta la vi (gratis, sino no hubiera caido) y más allá del tópico bestial poca cosa puedo aportar, porque me parecio un bodriete tremendo, pero alguna situación, por absurdamente mala, hasta me resultó simpática...
Fotogramas es una revista cara desde el punto de vista de su producción, pero si ves la publicidad que la mantiene, es de las distribuidoras... Quienes la escriben no muerden la mano del amo.
Hay otras opciones, aunque es verdad que van desapareciendo. Todo lo que hay que hacer es plantarse y no ceder terreno... Hay que seguir publicando reseñas, críticas, notas sobre cine desde la opinión personal e independiente.
Entendí tu punto, sólo que nos vamos acomodando a esa metacrítica (la crítica de la crítica) y vamos cediendo terreno y eso, ya lo dije, estoy convencida de que no hay que hacerlo.
La verdad es que no me he animado a hacer una crítica sobre esta película. Yo también tuve el "honor" de acudir a la misma sesión. Reseñar una película como ésta es complicado, ya que no sabes si la tienes que poner a parir y no dejar títere con cabeza o simplemente reservarte la consecución de risas que nos echamos e improperios que soltamos nada más acabar la película.
Por mi los de Casa Asia pueden seguir invitándome a este tipo de películas o al resto de los que nos tienen acostumbrados, un ejemplo sería "El Arco" del coreano Kim Ki-Duk. Y agradeceré siempre al señor Yume por avisarme de este tipo de películas (de los dos tipos de películas...)
Hago una breve pausa en mi ausencia decembrina para decir que estoy fascinado al contemplar estas reacciones tan exquisitamente viscerales que puede generar un despropósito como Dead or Alive.
Sólo por haberlas contemplado in situ za hubiera valido la pena no haber fallado en encontrar la dirección aquella noche. Es una lástima.
Personalmente creo que no se hubiera ofendido la gente de Cine Asia si hubieran encontrado una crítica desfavorable hacia este truñaco (que no he visto ni pienso, pero bastante cosa mala he leído de ella ya...), ya que lo más probable sería que la hubieras escrito desde el respeto hacia la gente que te ha invitado. Con respeto, pero sinceridad a la hora de valorar la película en cuestión. De todos modos, valoro mucho el reconocer que cuando no se puede, pues no se puede. Y punto, todos contentos.
Un saludo!!
Solo di "me gusto" o "no megusto"
Imagine todo lo que se podría haber tenido en cuenta su comentario si se hubiera identificado...
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