flickr_2 sorting_options_flled-512

jueves

Sitges 2016: el recuerdo árido (Phantasm, 1979) [revisitando etdc 10]



The Tall Man: You think when you die, you go to heaven. You come to us!


phantasm


RELATO CINECARTOGRÁFICO
¿Puede el fantasma de un pasado que no ha existido más que en tiras de celuloide reconstruir la actualidad? La respuesta es que sí. Por supuesto. Sí en (y desde) el universo cinematográfico.

En la infancia, las experiencias en el mundo real organizan nuestras neuronas, y crean el contexto que consolida nuestros futuros esquemas mentales. Pero la realidad es más o menos estable, y es la ficción, lo fantástico, lo onírico, lo auténticamente revolucionario, lo que de verdad deja marca en nuestra infancia. Durante un tiempo, no hay frontera entre ambos mundos, y el niño no hace diferencias, ni le importan. El monstruo de debajo de la cama es tan real como la madre que consuela, o la luz que protege. Es en este momento cuando la mente infantil explota y se abre, ávida de conocimiento. Venga éste de donde venga. Pero poco a poco se van apostando guardias en las torres de vigilancia de esas zonas linde y se colocan los puestos fronterizos que limitan lo que pasa de un territorio al otro, hasta que, eventualmente, “el adulto completo” cierra totalmente las aduanas y decide permanecer en lo real. Suerte que esto es el futuro y ya quedan pocos de esos adultos completos.

La imagen que encabeza este texto es la pieza clave de ese acertijo hecho película que es Phantasm, un tratado sobre el proceso de duelo y los procedimientos alrededor de la muerte, convertido en una fantasía terrorífica llena de imágenes icónicas tales como las esferas voladoras, el mausoleo de mármol, o el portal al otro mundo en la sala de los barriles. Pero por encima de todos éstos, dos elementos de esta película marcaron mis pesadillas infantiles. Dos imágenes que no me abandonaron nunca, y de forma consciente o inconsciente han formado parte de mi forma de ver el mundo. La primera es El Hombre Alto, interpretado por Angus Scrimm, sin lugar a dudas mi primer gran e imborrable hombre del saco. Hace unos meses, leí en la cuenta de twitter de Bruce Campbell sobre la muerte a los 89 años de Scrimm y la noticia me dejó sinceramente apenado. Toda mi vida (vi la película de muy niño, y aunque el actor no se ha prodigado mucho, siempre era evidente su aportación, que solía ser sabiamente aprovechada para seguir remitiendo a su aparición en la cinta de Coscarelli), el Sr. Scrimm había sido el auténtico abuelo malvado. Todos los demás ancianos terroríficos del cine (pienso ahora en el reverendo Henry Kane de Poltergeist III) para mi eran ecos de El Hombre Alto. Y lo mismo pasa con la segunda imagen que pobló mis pesadillas durante muchos años, ese paisaje desértico de cielo rojo, colores saturados, y poblado de monjes miniaturizados en su incomprensible quehacer infernal. Para mí, ese desierto era lo extraño que acecha, un lugar que se escondía detrás de las cosas en el mundo real. Inalcanzable, pero a la espera: el portal de acceso se podría abrir en cualquier momento para succionarme. Y también era el territorio donde pasaban otras historias en la ficción, como Dune o Star Wars (es probable que fuera una inspiración a la inversa, pero los Jawas para mi fueron durante mucho tiempo demonios transportadores de barriles de cadáveres). Así que siempre creí en la existencia de esas dunas. Siempre.

Hoy con el recuerdo de Angus Scrimm bien presente, ese paisaje pasado, que nunca ha existido más que en fotogramas en sucesión rápida, forma más parte que nunca de mi historia y mi persona. ¿Y no es de eso exactamente de lo que va esta sección?


FICHA TÉCNICA
Nombre del lugar: Desconocido.
Visitante(s): Mike (A. Michael Baldwin), Jody (Bill Thornbury), Reggie (Reggie Bannister).
Fecha de la Visita: 1979
Situación: Desconocido.
Dirigido por: Don Coscarelli.
Director de Fotografía: Don Coscarelli.
Director de Arte: David Gavin Brown.
Efectos Especiales: Westheimer Company, Modern Film Effects.
Año: 1979



yume

No hay comentarios :